Tabaco o Salud. 

Dr. Anselmo Peluffo

1.Tabaquismo: una pandemia en expansión

Aunque el consumo de tabaco es de antigua data, su industrialización masiva comienza en el siglo XIX. Desde entonces, la práctica de fumar cigarrillos se ha difundido ampliamente a escala mundial. Actualmente, sobre un total de mil cien millones de personas, uno de cada tres adultos fuma. De éstos, alrededor del 80% viven en países de medios a bajos ingresos.

Antiguamente, el tabaco era masticado o fumado en diferentes clases de pipas. Esta costumbre aún persiste, aunque se encuentra en declinación y está siendo reemplazada rápidamente por los cigarrillos manufacturados y ciertos tipos de arrollados de hoja de bajo costo denominados «bidis» (India y Sudeste asiático). Estas dos regiones participan con más del 85% del consumo de tabaco mundial.

Fumar cigarrillos produce un daño a la salud mucho mayor que el uso de las formas antiguas de consumir tabaco.

El fenómeno comercial conocido como «globalización» ha facilitado el intercambio de bienes y servicios, incluyendo los cigarrillos. La caída de las barreras arancelarias promueve una mayor competencia que genera baja de precios, incrementa la publicidad y la promoción, y otras actividades que estimulan su demanda.

Un estudio reciente ha comprobado que las economías asiáticas que abrieron sus mercados en respuesta a la presión ejercida por Estados Unidos durante 1980 (Japón, Corea del Sur, Taiwan y Tailandia) registraron un aumento del 10% en el consumo de cigarrillos durante 1991, respecto de valores comparados con los que hubieran tenido de no haber liberalizado su comercio.

Los resultados econométricos de este trabajo permiten concluir que la corriente de liberalización comercial contribuye significativamente al aumento del consumo de cigarrillos, en especial en los países pobres y de medianos recursos.

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